Se fue el “Maestro” Carlos Carli

Son contados con los dedos de la mano los floridenses que conocieron a Carlos Carli, un notable músico y ser humano que nació y creció en 25 de Agosto, localidad floridense ubicada al sur de nuestro departamento, donde Carli vivió su primera juventud y donde hasta fue repartidor del diario El Heraldo, el que vendía en los trenes que pasaban hacia Florida y hacia Montevideo.

A pesar de su humilde condición económica, se propuso estudiar batería. Lo hizo y alcanzó un gran nivel en ese instrumento. Integró el grupo de Canelones “Los Betchers” con el cual conoció a Ricardo León y Cono Castro, músicos floridenses con los que emprendió la aventura de ir a tocar en Argentina, junto con un guitarrista de Canelones. Los cuatro formaron la banda “El Cuarto Poder” que tuvo un efímero éxito en algunos festivales de rock de Buenos Aires. Luego León y Castro volvieron a Uruguay, pero Carli se quedó, él quería triunfar como baterista.

Y vaya si lo logró: integró algunas bandas importantes del rock argentino, luego se marchó para Brasil donde estuvo unos años, y finalmente España, donde se afincó, tocó y enseñó y recibió los mayores elogios de los entendidos, que lo consideraron uno de los mejores bateristas del momento.

Tocó con los músicos más importantes del mundo, grabó discos, y puso en Madrid una escuela de batería de la que salían continuamente bateros de gran calidad. Fue llamado “el Maestro” por todos los españoles aficionados a la música.

Tanto fue su renombre, que la famosa firma Iberdrum, que tiene tiendas de venta de baterías y accesorios en varias partes del mundo, lo nombraron pocos años atrás como su nuevo endorser (representante de una marca).

Hace poco vino a Uruguay, como venía cada año para ver a sus amigos, para no olvidarse de sus raíces. Pero esta vez quería visitar a su familia en 25 de Agosto, quizás presintiendo que sería su última visita, aunque aún no sabía que tenía una enfermedad que terminaría con su vida.

Tras su fallecimiento, el pasado viernes 26, las redes sociales han repetido hasta el cansancio mensajes de consternación de sus cientos de amigos y admiradores por su partida, cuando aún tenía muchísimo para dar. Y todos los mensajes lo mencionan como el “Maestro”.

Maestro como músico, Maestro como ser humano. Maestro, con mayúsculas.

Antes de su muerte, El País de Madrid le dedicó un artículo que dice claramente la relevancia que tenía Carli en el ambiente musical español. Leelo aquí. 

Son muchos los floridenses que como músicos se han destacado a nivel internacional, y son unos cuantos los que no son conocidos por los propios floridenses. Carlos Carli es uno de ellos a pesar de que, como músico y como persona, ha dejado bien en alto el nombre de Uruguay.

Descansa en paz, Carlos Carli.