domingo, 2 de noviembre de 2014

La Curtiembre contamina la cancha de River

(Foto de FLORIDADIARIO)
A pesar de haber recibido en junio del corriente año un informe de la Dirección de Control Ambiental (DCA) de la DINAMA en el que se advierte acerca de un caso de contaminación por cromo en el predio deportivo del Club Atlético River Plate, la cooperativa Curtiembre El Águila continuó realizando el mismo procesamiento “inadecuado” e “irresponsable” de los residuos emanados de su producción.
Se trata de irregularidades constatadas en 2013 por el organismo, cuya profundización se comprobó a través de una nueva inspección realizada este año y  por la que el ministro de Medio Ambiente Francisco Beltrame pidió su cierre preventivo e inmediato.
PRESENCIA DE CROMO
Si bien el penetrante olor proveniente de la planta no es novedad para los floridenses, que han presentado reiterados reclamos, el informe advierte acerca de un escurrido de “lixiviados” con contenido de cromo, que corren ladera debajo de una laguna contaminada y llegan a la conocida cancha de fútbol.
Lixiviados son los líquidos (como en este caso el agua de lluvia) que tras atravesar por un sólido (como son las pilas de viruta de cuero con cromo), se llevan gran cantidad de sustancias de ese sólido (en este caso cromo).
Dicha razón fue la que llevó a la Intendencia Departamental a la suspensión de actividades en el escenario deportivo, bajo el entendido de que la salud de los concurrentes al mismo se encuentra amenazada por la presencia de un metal pesado cuyas consecuencias para la salud pueden ser irreparables.
El informe destaca que los “lixiviados”, líquidos emanados por los residuos sólidos que han sido procesados con sustancias químicas en la planta, recorren apenas 100 metros para depositarse en el predio ocupado por el club deportivo.
ACUMULACIÓN DE RESIDUOS
De acuerdo con la información recogida por la DINAMA en su visita a la planta el pasado 10 de junio, la cooperativa ha vertido nuevas pilas de residuos en el terreno de la planta, que se suman a los dejados por la firma anterior, lo que genera un proceso de acumulación que “aumenta el pasivo ambiental” y al mismo tiempo eleva los niveles de contaminación.
Según relatan los técnicos, “en la parte trasera (de la Curtiembre) hay una zona en la que la empresa anterior vertió viruta de cuero constituyendo un pasivo ambiental. En inspección se observó que se había vertido nueva viruta recientemente.”
En este sentido, se especifica que “ladera abajo respecto al área de disposición de la viruta, se encuentra una laguna que dista unos 100 metros de una cancha de fútbol social, hacia la cual escurren los lixiviados de las pilas de viruta con cromo”.
VOLQUETAS EN MONTONES
Teniendo en cuenta que el principal factor de contaminación de la cancha es el que afecta a los suelos, el informe de DINAMA constató el vertido de desechos equivalentes a más de 40 volquetas en condiciones absolutamente irregulares que se encuentran en “montones” ubicados en la “parte trasera de la planta”.
En referencia a esta conducta por parte de la empresa, la DCA concluye que “el vertido de viruta sobre el suelo desnudo (es) una práctica irresponsable. La ‘laguna’ en la parte baja es muy probable que contenga cromo, por escurrimiento del agua de lluvia que cae sobre la pila de viruta, con el consiguiente daño ambiental y sanitario para la población local”.
EL HERALDO


No hay comentarios:

Publicar un comentario