De boliche en boliche

El boliche por el cual los vecinos reclaman.

Más de 40 vecinos reclaman por los excesos en un boliche de la calle José E. Rodó entre Dr. González y Manuel Calleros y su zona de adyacencias, en pleno centro de la ciudad de Florida, frente a un juzgado y a dos cuadras de otro.
“NO estamos de acuerdo en la reapertura del boliche “30 y pico-Bar”, ubicado en José E. Rodó 322. –Mientras permaneció abierto los días viernes, sábado y domingo nos vimos todos impedidos de dormir tranquilos en nuestras casas habitaciones por ruidos molestos en dicho local, música a todo volumen, actuaciones en vivo de grupos, discoteca que era animada por DJ, él que arengaba a los concurrentes mediante un griterío infernal, concurrencia de menores, que esta comprobada su presencia por multas aplicada por el INAU, el cual fue unos de los motivos de la clausura anteriormente”, comienzan relatando los vecinos en un escrito que están enviando a todas las autoridades de la ciudad.
Según agregan “luego de la reapertura abren todas las noches, siendo en la actualidad los días lunes, martes, viernes y sábados los días de más concurrencia y por lo tanto más bochinche”.
Los vecinos solicitan además “que se tomen las mismas medidas que se tomaron con los antiguos propietarios”, los cuales fueron multados por INAU y obligados a cerrar sus puertas.
Pero eso ocurrió hace meses, y ya desde el mes de diciembre, la reapertura “es de lunes a lunes” y con otros detalles que los vecinos no se animan a denunciar por temor a represalias.
MUCHO RUIDO Y POCAS NUECES
Los ruidos molestos que se originan en la calle, provocados por los concurrentes a dicho boliche, son la principal molestia por la que se reclama.
“Motos con escapes libres, motos que ahora tienen radios con música y (sus conductores) que se quedan afuera ingiriendo bebidas alcohólicas con la música a todo volumen”, es otro de los agregados, pero hay más.
Los vecinos se sienten invadidos. “La gran mayoría de nosotros tuvimos que entrar los bancos de calle por ser invadidos por los que quedan afuera, orinan en cualquier lado, vomitan en las inmediaciones, se han quedado con música a todo volumen hasta las siete u ocho de la mañana; en una palabra estamos viviendo en un CAOS (Sic). Salen en motos de a tres contra-flecha y sin casco, forcejean puertas de las casa habitaciones, de los autos estacionados”, resumen.
“En una palabra, mientras está abierto el Bar, nosotros tenemos que estar encerrados y con un ojo abierto”, agregan.
AMENAZAS
Algunos de los vecinos también han sido amenazados por quienes ofician de porteros o cuidadores del lugar.
“A una vecina le mandaron a decir que no hiciera más denuncias en la intendencia. En meses pasado se mantuvo entrevista con el Sr. Jefe de Policía, al que se le informó lo que nos estaba ocurriendo y además hemos desfilado todos nosotros por la Dirección de Higiene a hacer estas denuncias, han venido a medir los decibeles a algunas casas y sabemos que dan volúmenes por encima de los permitidos”.
Según la carta, también un comercio hotelero de la zona hizo denuncias. “Los propietarios del Hotel Español, presentaron carta en meses pasados debido a que se quejaban los huéspedes de los ruidos molestos, y el último evento lo tuvieron la noche previa a la corrida de la 8K en el que estaban hospedados corredores de otros departamentos que no pudieron descansar adecuadamente”.
FLORIDADIARIO