Unos 5000 peregrinos llegaron a Florida de todo el país para congregarse este domingo para homenajear a la Virgen de los Treinta y Tres en el cincuentenario de la declaración de la Virgen de los Treinta y Tres como Patrona de Uruguay.
Las actividades de la gran peregrinación nacional al santuario de la Virgen comenzaron a la hora 10 frente a la catedral Basílica de Florida, con la Solemne Eucaristía presidida por el Obispo de Florida, Monseñor Martín Pérez Scremini. En la misma estuvieron presentes además los obispos de las otras 9 diócesis del país, junto a sacerdotes y diáconos de todo el país.
En las palabras vertidas ante los miles de fieles participantes de la fiesta el obispo de Florida Monseñor Martín Pérez Scremini agradeció a todos los que se desplazaron a Florida desde distintos puntos del territorio nacional a caballo, en ómnibus e, incluso a pie, para venerar a la Patrona de la Patria.
Pérez Scremini agradeció también la participación del Obispo de Brescia, Italia, Mons. Luciano Monari, quien también estuvo presente este domingo en Florida para participar de las actividades y del Obispo Auxiliar de Valparaíso (Chile) y Secretario General del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), Monseñor Silva Retamales.
Otro de los encargados de la oratoria fue el Obispo de Tacuarembó Monseñor Julio Bonino quien dijo: “No hay mejor forma de fortalecer nuestra fe que compartiéndola y por ello nuestro urgente compromiso misionero”.
Bonino exhortó a los católicos al estudio de los documentos conciliares y del catecismo de la Iglesia Católica, que según dijo “constituyen textos básicos para confirmar, comprender y profundizar lo que creemos” y a madurar la dimensión social de la fe”.
Monseñor Julio Bonino destacó la convocatoria por parte del Papa Benedicto XVI de un año de la fe, que se inició el pasado 11 de octubre y que culminará el 24 de noviembre de 2013 con la finalización del año litúrgico.
“Los obispos del Uruguay asumimos con alegría esta iniciativa providencial y les recordamos que esta fecha no es casual: coincide con los 50 años de la apertura del Concilio Vaticano II, convocado por el Beato Papa Juan XXIII y continuado por el Papa Pablo VI, que sigue siendo un faro luminoso en el camino de renovación y fidelidad de la Iglesia actual”.
El Obispo de Tacuarembó llamó reafirmar el compromiso de “volver a la escuela de la fe” dado que, advirtió, “todo lo que no se renueva se echa a perder”.
“Nuestro Papa haciendo frente a la crisis del mundo nos propone el camino de la renovación de nuestra fe, camino de conversión. Digámonos unos a otros que la mejor manera de reafirmar nuestra fe es dándola. No hay mejor forma de fortalecer nuestra fe que compartiéndola y por ello nuestro urgente compromiso misionero”, acotó.
Posteriormente Bonino animó a los peregrinos a madurar la dimensión social de la fe. “Proclamemos personal y comunitariamente que Jesucristo es el rostro humano de Dios y el rostro divino del hombre”, dijo. Al respecto continuó diciendo que “los cristianos estamos llamados a contemplar en los rostros sufrientes de nuestros hermanos, el rostro de Cristo que nos llama a servirlo en ellos. Los rostros sufrientes de los pobres son los rostros sufrientes de Cristo. Ellos interpelan el núcleo del obrar de la Iglesia, de la pastoral y de nuestras actitudes cristianas”, subrayó.
EL HERALDO
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